No hay nada mejor para reforzar la amistad entre compañeros de
trabajo que compartir una aventura llena de sensaciones positivas
envuelta en unos paisajes fantasticos. Lo saben muy bien los amigos que
trabajan en las opticas La Creu Blanca. Por eso no dudaron en planear
una excursion en piragua por el Ebro, y decididos escogieron el tramo de
Vinebre a Móra
Los trabajadores "liaron" en algun caso a sus parejas e hijos, que tambien disfrutaron a tope de la salida.
Empezamos en el nuevo embarcador de Vinebre, y enseguida llegamos al Pas de l'Ase, con sus paredes impresionantes. Pasamos por la Isleta dels Mugrons y, sin dejar de jugar y remar, llegamos a otra isleta en medio del rio, que señala el fin del Pas de l'Ase, donde hicimos un pequeño alto.
De camino a Garcia, el cierzo nos ayudó a avanzar, y
al llegar al antiguo paso de barca del pueblo, una buena tajada de melon
y un refresco nos permitieron recuperar fuerzas para continuar hasta
Móra.
En este ultimo tramo quedaba aun una nueva y gratificante sorpresa; adentrarnos a la Isla de Subarrec, casi una selva en nuestra tierra. No fue nada facil entrar en esta isla, ya que tuvimos que superar un arbol caido que casi cerraba el paso, pero os aseguramos que valió la pena el esfuerzo!
Poco despues llegabamos a Móra, con los estomagos suficientemente preparados para una buena comida!
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un poco de clase antes de salir |
Los trabajadores "liaron" en algun caso a sus parejas e hijos, que tambien disfrutaron a tope de la salida.
Empezamos en el nuevo embarcador de Vinebre, y enseguida llegamos al Pas de l'Ase, con sus paredes impresionantes. Pasamos por la Isleta dels Mugrons y, sin dejar de jugar y remar, llegamos a otra isleta en medio del rio, que señala el fin del Pas de l'Ase, donde hicimos un pequeño alto.
Una de las islas del Pas de l'Ase |
En este ultimo tramo quedaba aun una nueva y gratificante sorpresa; adentrarnos a la Isla de Subarrec, casi una selva en nuestra tierra. No fue nada facil entrar en esta isla, ya que tuvimos que superar un arbol caido que casi cerraba el paso, pero os aseguramos que valió la pena el esfuerzo!
Poco despues llegabamos a Móra, con los estomagos suficientemente preparados para una buena comida!
Llegando a Móra a través del galatxo |
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